La mejor fuente de información es él mismo a través del diccionario biográfico que compuso (Deseo cumplido del que investiga acerca de la historia de los tradicionistas de al-Andalus) al dar información sobre personalidades con las que se encontró. Con ese repertorio continuaba la obra de al-Humaydi, aunque también repite buen número de las biografías que recogío éste.

Estudió con gran número de maestros en Murcia, Lorca, Valencia, Ceuta, Marraquech, Bujía y ciudades de Oriente, pues realizó un viaje de peregrinación que lo llevó a los santos lugares del Islam.
Como tradicionista compuso un par de obras de hadices que no se han conservado y que fueron eclipsadas por su repertorio biográfico, que sí ha llegado hasta nosotros. Para la elaboración de éste, que contiene algunas más de 1600 biografías, utilizó tanto fuentes escritas como orales. Dedica al final del mismo un apartado a las mujeres con un total de 13, entre las que está al-Gassaniya, de Pechina, y al-Ballishiya, la velezana, paisana suya.

Sus biógrafos alaban la destreza en otra de sus actividades, la de copista y cuentan que una importante personalidad de Baza le encargó realizar una copia de la obra más importante del derecho malikí, el Muwattaa de Málik b. Ánas, y que elaboró el encargo, cumpliendo todas las especificidades que se le habían solicitado, en una semana, con gran maestría.
Murió, de forma prematura, en Murcia, el 11 de enero de 1203, al caérsele encima el muro de un jardín (no se sabe si el de su casa). Aunque fue rescatado con vida, no tardó en morir.


Bibliografía:
ÁLVAREZ MILLÁN, Cristina (2012), "al-Ḍabbī, Abū Ŷaʿfar", Biblioteca de al-Andalus, 1, pp. 304-307 (nº 94), Almería.