En 1884, la corporación municipal bajo el mando del alcalde D. Francisco Teruel Castro, manifiestan que “cercana la época de sequías en este término municipal y de la aminoración de sus aguas, era llegado el momento de que le Municipio acordara lo que se estime más beneficioso para el aprovechamiento de las mismas…”. Aguas con las que se riegan los Pagos de La Huerta, Llanos, Aljáriz y Mendras. Aguas comunales destinadas al riego y al abastecimiento público.
Tras varios litigios con la Sociedad “La Concordia”, ésta facilita al vecindario el aprovechamiento de las aguas. Estas se convierten en aguas comunales para su régimen y aprovechamiento. El resto del agua no utilizada para el riego pasará a ser pública para el pueblo de Antas que tendrá derecho a establecer fuentes y tomar el agua necesaria. El pueblo tendrá la obligación de defender las aguas cuando las vea en peligro de menguar.
Para el aprovechamiento de las aguas, la Empresa “Concordia” construye un cauce por donde conducirlas, costeado en su totalidad por el Ayuntamiento de Antas. El objetivo es recibir íntegramente las aguas sin desmembración, aumentando su riqueza pública y favoreciendo el mayor riego posible, utilizándolas así el vecindario con mayor comodidad y en mejores condiciones higiénicas.
El Ayuntamiento se compromete a la vigilancia y custodia, puesto que se hace un reconocimiento de aguas públicas.
A partir de este momento se acuerda “la limpieza urgente de los cauces comunales y de todos los nacimientos de aguas públicas que sirven para el abastecimiento de los vecinos, haciendo que desaparezcan los objetos y materias perjudiciales para la salubridad. (…) En participación con la sociedad Concordia, se conducirán por el cauce de hierro que el Ayuntamiento de Antas y los propietarios del pago de La Huerta han construido recientemente en la cabeza del Pago de Aljáriz, atravesando el río de esta villa para lo cual se levantará toda la obra necesaria a fin de que no se extraiga agua alguna ni se perjudiquen los derechos de ningún regante a utilizar estas aguas…”
Es en el acuerdo de 17 de junio de 1888 donde se hace el resumen de la situación de la cesión de aguas a los pagos del pueblo y se aprueba el Acueducto de Hierro de la Viga. |