Este área, que se localiza al este de la provincia, en el término municipal de Sorbas, ofrece interés por sus aspectos geológicos, botánicos y paisajísticos y, sobre todo, espeleológicos. El enclave kárstico está surcado por el río Aguas, que atraviesa una extensa capa de yesos, encajándose en profundos cañones que forman pozos y galerías que desembocan amplias salas con estalactitas y estalagmitas. Muestra de ello son Cuevas del Agua y la de Covadura, de obligada visita. El paisaje vegetal, en el que destaca el tomillar aclarado, es muy peculiar y entre la fauna existente sobresale la presencia del galápago leproso y de la tortuga mora.
Para las visitas es necesario contactar con guías de espeleología o solicitar autorización al AMA. Sin este permiso está prohibido acceder a las cuevas.